Conozca las Bahamas, su alternativa (casi) libre de impuestos

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En los primeros siglos, las islas que conforman Las Bahamas fueron el refugio predilecto de piratas y bucaneros. Hoy en día, las Bahamas es una de las jurisdicciones libres de impuestos preferidas por los ricos y famosos siendo además uno de los 10 principales centros financieros internacionales por servir como base de operaciones claves para organizaciones financieras y bancarias.

Las Bahamas es un archipiélago de 700 islas que se extienden en más de 500 millas en el Atlántico y cuya isla principal, Bimini cuenta con buenas conexiones aéreas a Estados Unidos y Europa estando a apenas 50 millas de la costa de Florida. Esta favorable situación geográfica, junto al hecho de que no hay impuestos sobre la renta ni corporativos, ni tampoco hay impuesto sobre ganancias de capital, ni impuestos sobre las ventas, ni se practican retenciones, ni tampoco hay impuesto sobre donaciones o sucesiones testamentarias, hacen que Bahamas sea un lugar muy atractivo para vivir y llevar a cabo negocios.

La estabilidad política, el buen clima y una sólida infraestructura

Casi 270 años de democracia parlamentaria ininterrumpida han hecho que Las Bahamas sea uno de los países más estables del mundo. Siendo una nación independiente desde 1973 y una de las democracias más antiguas y vibrantes en el hemisferio occidental, Las Bahamas es miembro de la Commonwealth de Naciones, las Naciones Unidas y tiene condición de observador en la Organización Mundial del Comercio.

Su sistema político se basa en el modelo parlamentario británico, y el derecho común inglés es la base de su sistema judicial a pesar de que muchos elementos reguladores han sido añadidos durante los últimos años. Las Bahamas reconocen a la Reina como su Jefa de Estado, representado por un gobernador general nombrado por el Gobierno de las Bahamas. La estabilidad política del país y el estado soberano son algunos de sus puntos fuertes para posicionarlo como centro financiero internacional.

Aunque está situado casi en su totalidad dentro de los trópicos, las Bahamas tienen un clima muy agradable, claramente tropical, moderado por la Corriente del Golfo. No hay grandes temperaturas extremas, los meses de invierno son los más secos y soleados, con temperaturas ligeramente más bajas, menor humedad y una frecuente brisa del mar. La mayoría de las islas son bajas y su precipitación anual es inferior a otras islas de las Indias Occidentales. El clima local sólo tiene un inconveniente: hay tormentas tropicales. El archipiélago tiene una superficie de aproximadamente 161.557 millas cuadradas con miles de islas e islotes, pero sólo unas pocas de ellas están habitadas. Alrededor de dos tercios de la población vive en la isla de Nueva Providencia, donde se encuentra la capital del país, Nassau.

Desde hace muchos años, el gobierno ha gastado considerables sumas de dinero en la mejora de infraestructuras y Las Bahamas tiene ahora un sistema moderno de transporte y de redes de telecomunicaciones así como buenas instalaciones médicas.

Cuenta con seis aeropuertos internacionales atendidos por aerolíneas internacionales que ofrecen vuelos directos desde y hacia muchos destinos de Europa, Norte y Sur América y el Caribe, con conexiones a todo el mundo. Vuelos domésticos de la aerolínea nacional, Bahamas air, vinculan todas las islas principales. Y los servicios charter están disponibles para todas las partes del archipiélago.

Por otro lado, los 23 puertos de la nación incluyen un puerto para cruceros en Nassau y una instalación moderna para buques que transportan contenedores en una zona de libre comercio de 200 millas cuadradas en la Isla de Gran Bahamas.

En cuanto a instalaciones médicas, el hospital Princess Margaret en New Providence, la isla principal, ofrece una buena gama de instalaciones especializadas. También hay otros hospitales privados más pequeños, Doctors Hospital y Lyford Cay Hospital, que también ofrecen tratamiento médico especializado. Los establecimientos hospitalarios también existen en Freeport, y numerosas clínicas están ubicadas a lo largo de las Bahamas. Residentes médicos profesionales proporcionan atención sanitaria en las Islas Family.

Un ambiente (casi) libre de impuestos

Una de las atracciones más interesantes de Las Bahamas es una ausencia casi total de impuestos directos. No se aplican impuestos sobre las ganancias de capital, beneficios empresariales, ingresos personales, ventas, dividendos o sobre sucesiones. Esta libertad fiscal está disponible para todas las empresas residentes, sociedades, particulares y fideicomisos.

Los ingresos provienen en su mayoría de derechos arancelarios, impuesto a la propiedad y los derechos de timbres. Hay impuestos sobre importación bastante elevados y casi todo lo adquirido en Las Bahamas es considerablemente más caro que, por ejemplo, Florida, donde la mayoría de los productos son importados. Un coche puede costar un 50% más en las Bahamas que en otros lugares. Los aranceles aduaneros son entre el 55% y el 82% de los valores contables.

Economía estable

Con una moneda a la par con el dólar de Estados Unidos, la economía de Las Bahamas depende en gran medida de los servicios turísticos y financieros. El turismo representa casi dos terceras partes del producto interno bruto del país y da empleo directo a más del 40% de la fuerza laboral. El sector financiero, que representa alrededor del 15% del PIB, es el segundo pilar de la economía. Alrededor de 400 bancos y compañías fiduciarias están autorizadas para operar en Las Bahamas, con unos activos totales bajo gestión, de alrededor de 200 mil millones de dólares.

El registro de buques también representa un negocio considerable, así como el envío de las listas de registro Bahamas cerca de 1.600 buques mercantes, convirtiendo al país en el primer lugar en el mundo para el registro de cruceros y el tercero en tonelaje mundial.

La economía local es bastante estable y goza de un crecimiento razonable con baja inflación, en gran parte debido a la fortaleza de la industria turística. Las Bahamas, naturalmente, dependen en gran medida de la situación económica de los EE.UU., y una recesión en este país siempre tiene un impacto en esta nación de islas. Pero estas islas gozan de un amortiguador por el crecimiento constante del turismo y el auge en la construcción de hoteles, de recursos y de nuevas residencias que han conducido a un crecimiento sólido de su Producto Interior Bruto.

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