Nota del Editor:
https://mundooffshore.net se complace en publicar esta contribución de Sam Ojeda de MyCBS.biz, donde se encarga de la sección “Por mi Cuenta”, dedicada a ayudar a aquellos que quieren salir de la esclavitud de las deudas y labrarse un futuro de prosperidad. De estilo directo, no cree en la autoayuda: «La mayoría de las personas requieren un “alguien” a quien dar razón, de lo contrario caerán en el desánimo o la autocomplacencia».
30 de Octubre 2014
Hace ya un par de años que nuestra colega Ivanna Vivanco escribió un artículo que causó la visita de muchas personas a nuestro sitio web para leerlo, algunas de las cuales son ahora clientes o suscriptores a nuestras publicaciones.
El artículo en cuestión contaba paso a paso la odisea que ella tuvo que pasar para hacerse de una cuenta bancaria offshore que le permitiera poder sacar adelante su negocio en Venezuela.
Una virtud adicional del mismo, sin embargo, fue que describió —como una introducción a dicho artículo— las razones por las cuales una persona querría tener una cuenta fuera de su país. Ella mencionaba 3 razones muy válidas: de tipo político y cambiario, de impuestos y razones de seguridad y privacidad.
Posteriormente nuestro director Samuel Arenas se “copió” de Ivanna al redactar otro artículo que también tuvo mucha aceptación. El mismo, incorporaba una razón más: el de nuevas oportunidades de inversión. Ahora, quisiéramos discutir estas cuatro razones un poco.
Las razones de tipo político y cambiario tienen que ver con el hecho de que el más nefasto de los impuestos es sin duda la combinación de devaluación e inflación, la cual se come el caudal económico de una persona que ve morir mes a mes su potencial financiero. Tal plaga, desanima al ahorro a la vez que incentiva el consumismo ya que muchas personas ven que gastando en la compra de bienes es la única forma en que pueden hacer que su dinero les rinda.
El acoso y persecución políticos cuentan igualmente al considerar una cuenta bancaria en el exterior, así como los nefastos controles de cambio que agotan las posibilidades de negocio, por mucha inventiva, capacidad y perseverancia que alguien tenga.
La segunda razón que estos autores mencionaban era la razón impositiva. Aquí hay que hablar con cuidado, con pinzas ya que no queremos que se nos malinterprete. Entre el IGV o IVA, el impuesto a la renta y otros, un ciudadano puede verse despojado de un 50 % o más de sus ingresos. No es sino muy lógico que personas de intelecto y motivación prefieran arreglar sus asuntos impositivos de una forma tal que la carga sea menor. Esto desde luego, si hay alguna forma de hacerlo sin violar la ley.
La tercera razón mencionada se refería a la seguridad y la privacidad. Nadie tiene derecho a saber lo que uno tiene o deja de tener, ni lo que uno hace con su dinero. Sin embargo, en muchos países cualquier funcionario bancario puede eventualmente compartir con terceros, información sensible de nuestras finanzas a cambio de una prebenda.
Pero hay más: el dicho de la abuela aconseja a no poner todos los huevos en la misma cesta y esto se aplica también al dinero que uno pueda tener. ¿Por qué hemos de tener toda nuestra capacidad financiera bajo la sombra del país en el cual vivimos?
La simple seguridad contra chantajes, secuestros, extorsiones y juicios amañados que buscan despojarnos de lo nuestro, son una poderosa razón para internacionalizar nuestro dinero, ayudándonos a mostrar una cara financiera menos interesante a los bribones que nos estén acechando.
Además, debemos considerar la precaución necesaria ante los abusos de algunos estados que no respetan la propiedad privada y enajenan capitales, tierra y propiedades sin que tengamos “derecho a pataleo”.
Por último, revisemos la razón de nuevas oportunidades de inversión. Pongamos para ello el caso de alguien que resida en Perú. Tal persona, que quiera comprar oro fino para tenerlo como un resguardo de valor, pasará muchas dificultades ya que —aunque el país es el sexto productor mundial de oro— no ha desarrollado una infraestructura comercial al respecto, ni promociona entre sus ciudadanos la conveniencia de comprar oro fino físico (como sí lo hacen los países asiáticos). La compra de joyas de oro será una alternativa que queda lejos de lo ideal, por su alto precio y su grado inferior de pureza. Si además dicha persona quisiera invertir en acciones cotizadas en la bolsa TSX Venture de Canadá, por ejemplo, le será casi imposible.
Otra cosa sería si nuestra persona-ejemplo decidiera abrir una cuenta bancaria offshore apropiada, pues podría comprar oro en barras/monedas con una pureza del 0.9999 y tenerlas en custodia con el banco o con alguna empresa especializada pagando solamente entre 2 y 3 % sobre el precio spot. Igualmente, podrá usar la plataforma en línea de dicho banco para la operación en muchos mercados diferentes y con diversos instrumentos. Accederá además, a oportunidades de inversión que nunca podría conseguir en su país de residencia.
Si usted pertenece al reducido grupo de hombres y mujeres que no camina con la manada, que piensa y toma decisiones por sí mismo y que entiende que el labrarse un futuro consiste de cada decisión y paso correctos que tome, queremos ayudarle en sus proyectos. Estaremos a sus órdenes para lo que quiera consultarnos en el campo de nuestra experiencia.
Un saludo a su futuro,
Sam Ojeda
Estructuras y Cuentas Bancarias Offshore
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Este artículo fue publicado originalmente en MyCBS.biz
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