A raíz del fallido intento en Panamá de cobrar impuestos extraterritoriales a las empresas radicadas localmente pero de rentas extranjeras, volcando así casi 100 años de ser un destino para negocios que buscan la baja fiscalidad, nos precisamos en insistir sobre la planificación del patrimonio y la búsqueda de mejores alternativas para el crecimiento financiero. Nos basamos en una interrogante básica: ¿Por qué pagar si podemos evitarlo? –Es una inquietud universal que implica la habilidad para sortear las trabas que limitan el desarrollo personal y que es perfectamente legal.
En Estados Unidos de Norteamérica, por ejemplo, existen tres estados que compiten entre sí para atraer a los acaudalados de los demás estados, en la creación de fideicomisos o “trusts”, usados principalmente en la transferencia generacional del patrimonio, pues no cobran impuestos federales. Delaware, Nevada y Alaska compiten con sus legislaciones para ser atractivos con esos fines.
Nevada no tiene impuesto sobre la renta estatal y Delaware no grava los fideicomisos a menos que los beneficiarios vivan en el estado. La legislación fiscal de Nueva York no puede tocar los fideicomisos si los fideicomisarios, bienes materiales y bienes raíces están fuera del estado y no reciben ningún ingreso procedente de Nueva York.
La Mancomunidad Británica de Naciones, otrora colonias de Gran Bretaña sirven de paraísos fiscales a los ricos de Inglaterra, siendo las más conocidas: Las Seychelles, Nevis, Islas Vírgenes Británicas, Bahamas, San Vicente, Malta, Nueva Zelanda y porqué no, Singapur; además del Peñón de Gibraltar y Belice.
Otras jurisdicciones que compiten para ser atractivos con sus legislaciones son Islas cook, Liechtenstein, Andorra, Hong Kong y Puerto Rico, entre otros. Aunque ya los mayores beneficiados son las grandes corporaciones bancarias, en gran medida se aporta en la creación de empleos, mejorando el índice económico y el desarrollo consecuente.
Volviendo al caso de Panamá y observando las estimaciones de nuevos ingresos que generaría la ampliación del canal, que duplicaría los actuales, elevándolos hasta la cercana cifra de los 2,000,000 millones de dólares, pudieran ser un gran motivo para el conato legislativo de fin de año. Parece le creciera una aureola económica que no obtemperaron ni a los preceptos constitucionales ni previeron sus consecuencias. En ese sentido es imprevisible determinar cuándo habrá otro intento que logre conseguir esos objetivos.
¡Hay que estar preparados!, paráfrasis de Luc. 12:35-36 y recomendado en la situación planteada, de acuerdo a como hemos preparado nuestra estructura offshore, lo preferible es la redomiciliación de nuestras empresas en Panamá, considerando nuevas estrategias de planificación. ¡Eureka! A menos de un mes de espera, están planificados 3 eventos que ahora requieren de mayor relevancia, son auspiciados por la STEP (Society of Trust and Estate Practitioners) y Q wealth, empresa líder en asesoramiento offshore, tales eventos serán efectuados desde febrero 6 hasta el 14, en St. Kitts and Nevis, Antigua y Grenada, también disponibles individualmente.
Para mayor información al respecto viste el enlace siguiente: Q Wealth Events
La experiencia adquirida en estos eventos, formarán parte integral en toda perspectiva futura de la reestructuración y planificación del patrimonio necesarios, ante riesgos previsibles y evidentemente nefastos.
Los beneficios a ser percibidos con relación a la inversión de asistir a dichos eventos son inmensos, sin mencionar que en esas paradisíacas islas de Caribe que servirán de anfitrionas, podemos pasar a la vez unas impresionantes vacaciones, todo al precio de uno.
Esperando por su decisión para el fortalecimiento y protección de sus activos, desde MundoOffshore nos despedimos, reiterándoles que somos el puente perfecto para asegurarles su libertad financiera.
Homer Eiden
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