Cada vez más bajo la lupa de los países poderosos por todas las implicaciones que estos programas tienen a nivel fiscal, lo cierto es que los programas de ciudadanía por inversión están aún lejos de llegar a su fin. Como por ejemplo, demuestra la noticia de la reciente inversión en Antigua y Barbuda por Robert De Niro.
Y es que existen varios motivos que hacen de los intentos de países como Estados Unidos por desaparecer los programas de segunda ciudadanía, un esfuerzo fútil y mal articulado y que, contrario a poner en riesgo estos programas, los hace aún más legítimos, a la vez que evidencía grandes inconsistencias administrativas por parte del país más poderoso del mundo.
Antes de seguir, es importante puntualizar cual es la naturaleza de los programas para obtener un segundo pasaporte por inversión, se trata de una de las maneras más utilizadas por inversores que desean proteger sus activos, y mediante la cual, países como la isla de Dominica, Granada, Antigua y Barbuda o San Cristóbal y Nieves ofrecen pasaporte, así como facilidades de viaje, y una considerable disminución o incluso exclusión de impuestos.
¿Por qué Estados Unidos desea desaparecer los programas de doble nacionalidad por inversión?
Uno de los objetivos más importantes a mediano plazo de Estados Unidos se centra en sus fronteras, ya sea para la entrada o salida de ellas. En este caso la problemática es relativa a que EUA además de ser el más poderoso, es el país más endeudado en el mundo, conteniendo una crisis económica que se avecina cada vez más cercana. Bajo esta situación la FinCEN ( Red de Control de Crímenes Financieros ) y IRS ( Servicio de Rentas Internas ) son órganos del Estado Americano que cada vez más han adquirido relevancia en materia fiscal, ya que uno de los principales intereses de Estados Unidos se enfoca en eficientar los mecanismos de captación de impuestos.
Bajo esta lógica, cada vez que un ciudadano estadounidense consigue un segundo pasaporte y renuncia a la ciudadanía americana, el Gobierno de Estados Unidos pierde la capacidad de captar los ingresos provenientes de impuestos de esta persona. Lo cual representa un problema que a su vez se traduce en perdidas cada vez mayores, pues la fuga de capital de los Estados Unidos se ha incrementado continuamente, siendo el 2014 un año récord en esta materia.
En consecuencia, el gobierno Norteamericano, por medio de la SEC IRS y FInCEN ha implementado complicados mecanismos regulatorios que hacen sumamente difícil a un norteamericano el abrir cuentas bancarias fuera del país y cada vez más eficiente el proceso de recaudación de impuestos, como la ley FATCA. Además, ha ejercido una importante presión sobre países que ofrecen la doble nacionalidad, con el objetivo de que cierren estos programas.
¿Por qué los programas de ciudadanía por inversión están lejos de llegar a su fin?
A pesar de los intentos desesperados de Estados Unidos por deslegitimar los programas de ciudadanía por inversión, tales como la inversión en bienes raíces en el Caribe; es evidente que el argumento principal de FinCEN es contradictorio desde el hecho de que muchos de estos países no cuentan con exención de visa para Estados Unidos, con lo que es sumamente improbable que sean países de paso para actividades terroristas, por lo cual es señal de que los PCI están lejos de desaparecer.
De hecho además de los países que ya cuentan con estos programas, otros más están considerando integrarlos a sus políticas, el motivo por el que esta opción es asequible para estas y otras naciones es simple e incluso esta avalada por el FMI.
La mayoría de países que forman parte o consideran los PCI en sus posibilidades son naciones con una deuda-PIB bastante elevada. El caso de San Cristobal y Nieves es un ejemplo excepcional de como funcionan los programas de un segundo pasaporte por inversión, y la postura del gobierno norteamericano al respecto. Ya que para el 2009, el país contaba su deuda PIB que ascendía al 185%, una de las mayores del mundo. Tras la instauración de su PCI y diversas medidas para reestructurar sus finanzas avalado por el FMI, San Cristobal y Nieves muestra excelentes resultados de recuperación en los que espera reducir para el 2017 su deuda-PIB al 20%.
La recuperación de este país es evidente en términos de desarrollo, ya que tras su Programa de Ciudadanía por Inversión se observa un importante incremento en materia de turismo, construcción y una gran inversión del sector pulido, lo cual valió que el FMI reconociera públicamente la recuperación económica de San Cristobal y Nieves.
Tras lo anterior, la FinCEN ha declarado «Mientras otros países ofrecen programas de ciudadanía por inversiones, el programa de San Cristóbal y Nieves es particularmente atractivo para actores ilícitos, ya que de la manera como se administra, mantiene controles laxos en cuanto a quién se podrá conceder la ciudadanía”
Queda claro que pese a la controversia y la desaprobación general de los países desarrollados, los programas de ciudadanía por inversión están lejos de llegar a su fin y representan en la actualidad una de las mejores alternativas para diversificar activos.
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