Los casos de COVID-19 en EEUU superan el medio millón, mientras Trump encara la decisión de reabrir la economía
El número de casos de coronavirus detectados en los Estados Unidos aumentó en más de medio millón durante el fin de semana de Pascua con más de 18.600 muertes, mientras el presidente Donald Trump dijo que la decisión sobre cuándo era seguro reabrir el país sería la más grande que haya tomado jamás.
Los expertos en salud pública han advertido que el número de muertes podría llegar a 200.000 durante el verano si las restricciones de confinamiento que han obligado a cerrar negocios y a mantener en casa a la mayoría de los americanos se levantan pasados 30 días.
Trump, que aspira a la reelección en noviembre, ha dicho que quiere que la vida vuelva a la normalidad lo antes posible y que las amplias restricciones de movimiento destinadas a frenar la propagación de la enfermedad COVID-19 causada por el nuevo coronavirus tienen su propio coste económico y de salud pública.
«Voy a tener que tomar una decisión, y… espero por Dios que sea la decisión correcta», dijo a los periodistas el viernes. «Es la decisión más grande que haya tomado jamás».
Trump dijo que los hechos determinarían el siguiente paso. Cuando le preguntaron qué métricas usaría para determinar su elección, señaló su frente: «La métrica de aquí, esa es mi métrica».
Las directrices federales actuales son hasta el 30 de abril. El presidente tendrá que decidir si las amplía o empieza a animar a la gente a volver al trabajo y a una vida más normal.
Trump dijo que la semana próxima inaugurará un nuevo consejo asesor que incluirá a algunos gobernadores estatales y se centrará en el proceso de reapertura de la economía estadounidense.
El número de estadounidenses que han solicitado la prestación por desempleo en las últimas tres semanas superó los 15 millones, mientras que las nuevas solicitudes semanales superaron los 6 millones por segunda vez consecutiva la semana pasada.
El gobierno ha dicho que la economía purgó 701.000 empleos en marzo. Esa fue la mayor pérdida de empleos desde la Gran Recesión y terminó con el mayor auge de empleo en la historia de EEUU, que comenzó a finales de 2010.
1. La respuesta fiscal a la crisis alcanza ya los 8 billones de dólares
El FMI no ha esperado a la próxima semana, cuando presenta sus perspectivas sobre la economía mundial, para anticipar que la crisis actual tendrá peores consecuencias que la que siguió al crack del 29. En un discurso, su directora gerente, Kristalina Georgieva, ha reconocido que la pandemia hace que nos enfrentemos hoy en día a una crisis como nunca se había vivido. “Covd-19 ha interrumpido nuestro orden social y económico a la velocidad del rayo y en una escala que no hemos visto en la memoria viva”, ha asegurado.
Georgieva ha señalado que es el momento de que individuos, gobiernos, empresas, líderes de la comunidad y organizaciones internacionales actúen con decisión y trabajen juntos para ofrecer soluciones. “Estos son los tiempos para los que se creó el FMI: estamos aquí para desplegar la fuerza de la comunidad global, para que podamos ayudar a proteger a las personas más vulnerables y revitalizar la economía”, ha apuntado. Los 189 países miembros del FMI se reúnen de manera virtual y por eso la responsable del organismo les ha dejado claro que “las acciones que tomemos ahora determinarán la velocidad y la fuerza de nuestra recuperación”.
Peor crisis desde la Gran Depresión
Desde el FMI recuerdan que hace tan solo tres meses esperaban un crecimiento positivo del ingreso per cápita en más de 160 de los países miembro para este año y ahora se enfrentan a un panorama en el que más de 170 de ellos experimentarán un crecimiento negativo del ingreso per cápita. Además, asumen que en caso de que la pandemia se supere en la segunda mitad del año, la recuperación solo llegaría al año siguiente y solo de forma parcial.
Para la directora gerente del FMI es alentador, no obstante, que ya se hayan movilizado incentivos fiscales a nivel mundial de unos 8 billones de dólares. Ha pedido a los gobiernos que continúen con medidas esenciales de contención y apoyo para los sistemas de salud, que se trabaje para “proteger a las personas y empresas afectadas con medidas fiscales y financieras grandes, oportunas y específicas” y que se “reduzca el estrés del sistema financiero y evite el contagio”. “El estímulo fiscal coordinado será esencial”, ha asegurado.
Kristalina Georgieva ha apuntado que el FMI cuenta con un billón de dólares en capacidad de préstamo para poner al servicio de sus miembros y que están respondiendo a un gran número de solicitudes de financiación de emergencia procedentes de más de 90 países.
2. ¿Cómo se han comportado los activos refugio?
Son varios los activos refugio que ofrece el mercado, desde el oro, hasta ciertos bonos de la renta fija, pasando por las divisas. Pero, sin embargo, no todos se están comportando de la misma manera. De hecho, en la renta fija se ha observado una oleada de ventas que ha afectado tanto a la deuda pública catalogada como segura y a los bonos Investment Grade, que son los de más alta calidad.
Renta fija
“Un rasgo clave de esta presión vendedora han sido las ventas forzosas de los inversores que han tenido que deshacerse de sus activos más líquidos para reunir efectivo”, explica Ariel Bezalel, gestor del fondo de renta fija global Jupiter Dynamic Bond. Sin embargo, aunque esta oleada de ventas ha provocado una salida de los fondos de renta fija superior a los 200.000 millones en dos semanas, el experto considera que es un movimiento normal que ya se dio en la recesión de 2008. “Estamos viendo cómo se repite esta dinámica y ahora los bonos del Tesoro estadounidense están emitiendo señales de estabilización tras la fase de liquidación”, comenta Bezalel.
A pesar del varapalo sufrido en la renta fija, desde la gestora apuesta por una estabilización de los activos “a medida que pasa el tiempo y retomen su tendencia de mejor comportamiento relativo, pero en general los inversores deberían prepararse para sufrir más volatilidad”, señalan. Pese a ello, los bonos del Tesoro de EE.UU. a 10 años, acumulan en lo que va de 2020 una rentabilidad del +20,69%.
El dólar gana
Dentro de esos valores refugio, en las divisas tanto el dólar como el franco suizo hacen las veces de activos seguros. La mejor prueba de ello es que, pese al recorte de tipos de la Reserva Federal, el dólar ha batido a todas las grandes monedas. “En su condición de moneda de reserva del mundo, creemos que nos adentramos en un periodo en el que el dólar estadounidense va a reinar, debido en parte a la escasez de dólares en los mercados offshore”, añade el experto de Jupiter AM. Sin embargo, este movimiento puede causar importantes daños en la economía mundial, especialmente en los mercados emergentes, que tienen un gran volumen de deuda denominada en dólares.
El oro, buenas perspectivas
El oro acumula una rentabilidad del 6% desde que arrancó 2020. Sin embargo, en el peor momento bursátil el metal dorado sufrió un duro golpe que le llevó a perder gran parte de lo ganado, aunque ha ido recuperándolo. Este movimiento, según los expertos se produjo debido a que los inversores decidieron deshacerse de sus posiciones en oro para conseguir liquidez y paliar pérdidas causadas por la renta variable. Pese a ello, las perspectivas de los expertos y la demanda de los bancos centrales hacen pensar que el precio de la onza pueda subir hasta los 2.000 dólares en los próximos meses.
¿Cómo utilizarlo en una cartera?
Desde WisdomTree analizan tres tipos de carteras para poder afrontar el actual contexto económico. Para tener un posicionamiento defensivo, aseguran que el 45% debería estar invertido en renta variable de calidad, un 15% en materias primas como el oro y un 15% en renta fija. Desde la gestora aseguran que la rentabilidad para este tipo de cartera debería situarse entre el 5,9 y el 6,6% teniendo en cuenta los datos de 2019. Además, advierten que la volatilidad de este tipo de cartera debería moverse entre el 7,8 y el 6,9%.
3. ¿Qué divisas emergentes pueden aguantar mejor en la coyuntura actual?
La estrategia más común durante buena parte de las últimas semanas en el mercado de divisas ha sido la de comprar dólares estadounidenses con mayor o menor intensidad. No ha sido el momento actual una excepción, ya que en momentos anteriores de tensión en los mercados, el dólar siempre se ha considerado refugio. “En términos trade-weighted, desde el 10 de marzo y durante diez días seguidos el dólar se apreció un 8%, aunque desde entonces ha perdido parte de esas ganancias”, explica Enrique Díaz, director de Riesgos de Ebury. Ahora bien, ¿qué se puede esperar a partir de ahora, sobre todo con respecto a las divisas emergentes?
Divisas emergentes
Según los cálculos de Bank of America las monedas de países emergentes están, en promedio, un 20% infravaloradas con respecto al dólar estadounidense. En efecto, muchas de ellas están en niveles mínimos de dos años y son aquellas de países que más dependen de la producción de productos básicos las más afectadas, caso del rublo ruso que, según datos de Ebury, en marzo ha perdido “alrededor del 16% de su valor frente al dólar”. Sin embargo, también el peso mexicano y el peso colombiano han sufrido retrocesos contundentes, al igual que el real brasileño y el rand sudafricano. Y las caídas podrían continuar, dado que la expansión del coronavirus no ha alcanzado su punto álgido en muchas zonas del planeta.
Hasta el momento esto es lo que se ha visto en el mercado de divisas pero, ¿qué cabe esperar a partir de ahora?. Los expertos de Ebury tienen claro que la volatilidad seguirá en niveles muy elevados y que, a más corto plazo, “es posible que sigamos viendo al dólar como la divisa segura preferida, aunque es probable que el fuerte aumento del número de casos que estamos viendo en Estados Unidos limite el atractivo de la divisa”.
Mientras, por lo que toca a las monedas emergentes, estiman que aquellas con bases más sólidas “están mejor preparadas para capear cualquier posible venta adicional de activos de riesgo a la que el virus COVID-19 pueda inducir”. En ese sentido, creen que pueden mantener mejor el tipo las monedas de Brasil, China, India, Rusia y Corea del Sur, gracias a sus elevadas reservas de divisas, la baja deuda externa y el superávit o pequeño déficit en la cuenta corriente que muestran.
Según los cálculos de BofA, la moneda china, en concreto, está infravalorada en un 8% frente al dólar estadounidense. Además, subrayan que tanto el peso mexicano como el rublo están muy infravalorados mientras que las estimaciones del banco sitúan al peso colombiano como una moneda emergente que está sobrevalorada frente al dólar.
4. “El sector wealthtech atraviesa por un momento muy interesante”
Rodrigo García de la Cruz, presidente de AEFI (Asociación Española de Fintech e Insurtech) asegura que el sector wealthtech atraviesa por un momento muy interesante. “Está bastante consolidado, con más de 100 compañías operando en nuestro país”. García de la Cruz destaca que el sector financiero está haciendo especialmente énfasis en todo lo que tiene que ver con el ahorro y la inversión. “Estas compañías han llegado para ayudar al usuario final a tener más información, más transparencia y más conocimiento sobre dónde y cómo está invirtiendo”.
El Presidente de AEFI enumera los pilares básicos del sector wealthtech y destaca que es clave para él la sostenibilidad del ahorro y la inversión en el tiempo. Rodrigo García de la Cruz explica la situación regulatoria y supervisora actual del sector weathtech y qué es el sandbox.
5. El coronavirus dispara la demanda de las farmacias online
El confinamiento ha provocado un cambio en la rutina diaria de la sociedad. También en los hábitos de consumo. Aunque las farmacias se mantienen abiertas como uno de los servicios considerados esenciales, el miedo a la exposición al coronavirus ha provocado un fuerte repunte de los productos que ofrecen este tipo de establecimientos a través de Internet y, con ello, de las herramientas online enfocadas a este sector.
En este sentido, una de las más destacadas es Farmacias.com. La iniciativa parte del grupo Farmactitud, una start-up especializada en farmacia digital fundada en el año 2016 como un marketplace. En el momento de la pandemia, esta herramienta se encontraba en fase de desarrollo, pero dados los acontecimientos, su puesta en marcha se aceleró.
La aplicación fue lanzada el pasado 20 de marzo, a los pocos días de ser declarado el estado de alarma y, en tan solo siete días, contabilizó 10.000 descargas. Casi tres semanas después, esta iniciativa diseñada con la vocación de optimizar la atención farmacéutica «más allá del coronavirus», puede presumir de haber registrado más de 70.000 consultas y una conversión superior al 23%.
Pensada para priorizar los establecimientos en función de la ubicación del usuario, el buscador ofrece un directorio de más de 22.200 farmacias de manera gratuita. De esta cantidad, alrededor de 5.500 se encuentran integradas en la plataforma y 600 adscritas a su sistema online.
Uno de los puntos fuertes es que permite tanto hacer el pedido y recogerlo directamente en la farmacia para evitar tiempos de espera, como la entrega a domicilio. Por regla general, el envío se realiza en 24/48 horas, pero también cabe la posibilidad de solicitar un encargo exprés con un tiempo estimado de dos horas. Asimismo, en caso de que el producto no se encuentre disponible en la farmacia más cercana, ofrece el resultado más próximo al lugar en el que se encuentre el usuario.
Según comentan a DIRIGENTES desde la compañía, la alimentación infantil lidera las búsquedas y compras efectivas, aunque son las líneas de nutrición, higiene -sobre todo de manos y dermocosmética- las que lideran el crecimiento, con aumentos del 300%.
Herramientas de todo tipo
Ya existían mucho antes de la pandemia, pero esta situación ha dado pie a un boom de su popularidad. Luda Farma, la red neuronal de farmacias nacida en 2018 con el respaldo de la Asociación de Empresarios de Farmacias de Madrid (Adefarma), también ha adquirido un gran protagonismo en las últimas semanas. Con una aplicación, cuyo funcionamiento es similar al citado anteriormente, el valor diferencial que aporta es el servicio de recogida y envío de medicamentos para los pacientes, tanto si requieren receta como si no es necesario.
Así, con más de 1.500 farmacias adheridas en toda la geografía española, en caso de necesitar prescripción médica, el repartidor acudirá al domicilio dos veces: una para recoger la tarjeta sanitaria y la receta del usuario y una segunda para entregar toda la medicación solicitada. En el otro caso, no es necesario realizar ningún trámite previo, ya que el farmacéutico obtiene el número de tarjeta sanitaria mediante la aplicación.
«Estamos solucionando más de 700 casos al mes de medicamentos que actualmente tienen problemas de suministros», señala el fundador de Luda Farma, Luis Martín Lázaro, quien también añade que desde el comienzo de la crisis sanitaria han conseguido llegar a «más de 6.000 casas». Un punto de inflexión que puede marcar un antes y un después en el modelo de adquisición de productos en esta industria.
¿ Simple Rebote o Cambio de tendencia?
Dow Jones, S P 500 y Nasdaq 100, a examen
El Dow Jones acumula un rebote cercano al 30% desde los mínimos de marzo y el S&P 500, el principal índice del mundo, del 25%. Y al otro lado del Atlántico se dice que cuando los índices rebotan por encima del 20% desde mínimos es porque estamos ante el inicio de un ‘bull market’. En mi opinión esto más bien algo anecdótico que otra cosa, pero nunca se puede obviar. Pues la estadística de los distintos acontecimientos que han ido sucediéndose a lo largo de la historia en Wall Street tienen una base firme en la que se apoyan y funcionan por lo general bastante bien. Por supuesto que pueden fallar, pues no hay nada infalible en los mercados, pero el grado de acierto es alto. El problema es que seguimos sin figura de vuelta de ningún tipo y la experiencia nos ha demostrado en crisis anteriores que lo normal es que asistamos a una recaída hacia los mínimos. Y ahí es donde tenemos la clave.
Si estos aguantan, dejando la puerta abierta a posibles dilataciones de los precios desde los que construir potenciales divergencias alcistas, es probable que ahí tengamos un suelo de mercado. Pero si se perforan con claridad estamos a las puertas de un nuevo latigazo bajista de consideración. Lo único que de alguna manera me hace dudar de la posibilidad de volver a los mínimos es que son muchos los analistas que esperan esa recaída, y ya sabemos que por la Teoría de la opinión contraria, el mercado es especialista en hacer lo contrario de lo que la gran mayoría piensa. Por lo pronto y como aperitivo vamos a ver si el S&P 500 es capaz de recuperar con claridad la MM200 semanal.
Dow Jones
Queda mucha tela que cortar todavía, más que nada porque la experiencia nos dice que estamos asistiendo a un simple rebote (fase de reacción) tras un desplome previo en toda regla. De hecho, no tenemos figura de vuelta alguna a día de hoy y, lo normal, lo más probable es que asistamos después a una recaída hacia la zona de mínimos anuales. Ahí veremos si los precios hacen suelo o se perforan mínimamente para construirnos algún tipo de divergencia alcista o por el contrario se pulverizan sin contemplaciones. No lo sabemos. Nadie lo sabe. Hablamos de lo que históricamente, en términos de probabilidad, suele ocurrir. Sin embargo, reconozco que me gusta mucho el nivel desde el que está rebotando el índice, desde el 50% de ajuste/retroceso de toda la subida del último gran ciclo alcista, desde los aproximadamente 18.000 puntos. Si este soporte se perforara el siguiente lo tenemos en los 15.000 puntos (61,8%). Pero no podemos dejar de lado que, en esta crisis, nueva para todo el mundo, las cosas se suceden demasiado rápido para lo bueno y para lo malo. Y dado que todo el mundo habla de una recaída hacia mínimos uno ya empieza a dudar. Ya saben, la teoría de la opinión contrario suele funcionar muy bien.
S&P 500
Si es asiduo lector de nuestra página sabrá que un servidor es un claro convencido de la MM200 semanal como zona de soporte/resistencia en términos de largo plazo, según el momento de mercado en el que nos encontremos. No así, para nada, de la MM200 diaria que genera falsas señales tanto al alza como a la baja y que, salvo excepciones puntuales, genera mucho ruido y es muy poco efectiva. En el caso que nos ocupa, la MM200 semanal en el S&P 500 ha estado actuando como soporte, con precisión máxima, desde 2011 y ha sido en esta crisis por el coronavirus cuando se ha perforado con claridad. Y la pregunta del millón de dólares es si estamos ante un simple ‘pull back’ a la nueva zona de resistencia (antes soporte) para coger carrerilla a la baja o por el contrario estamos ante algo más que un simple rebote. De hecho, más allá de la media móvil semanal con la que el índice estadounidense se encuentra coqueteando, tenemos otra importante zona de resistencia en el último hueco bajista semanal al que se está enfrentando, en los 2.711 puntos. Cerrar o lo que es lo mismo anular este ‘gap’ sería sin lugar a dudas una señal de fortaleza a la que no podemos hacer oídos sordos.
Gráfico semanal del S&P 500.
NASDAQ 100
La tecnología sigue siendo sin lugar a dudas el sector que más fortaleza continúa demostrando. Y dentro del mismo las empresas que componen las llamadas FANG. Basta con mirar el gráfico semanal del índice para darse cuenta de los impecables mínimos y máximos crecientes de largo plazo a los que sigue dando forma el índice. Por no hablar de la MM200 semanal, que continúa actuando de soporte. La tecnología sigue siendo alcista en términos de largo plazo.
Gráfico semanal del Nasdaq 100.
Los precios no siempre representan una oportunidad
En este pasado mes de marzo, hemos asistido a una importantísima caída los precios de la mayoría de las acciones en diferentes mercados. Estamos ante niveles de precio no vistos desde hacía mucho tiempo, dejando cotizaciones de muchas compañías que, hasta la fecha, presentaban buenos fundamentales, en lo que algunos llamarían «precios de ganga».
Bien, dejando a un lado que esos fundamentales pueden, desgraciadamente, formar parte del pasado ya que el futuro que tenemos por delante no es para nada alentador, tampoco nada nos indica por el momento que no se puedan reanudar las caídas y dejarnos las cotizaciones de muchas empresas todavía en niveles inferiores a los mínimos de marzo.
Primero, el futuro como decía, ahora por ahora, no promete.
Segundo, como no tenemos la bola de cristal, nos hemos de basar en lo que el aspecto técnico nos dice, el precio debe, por decirlo de alguna forma, ser el que nos incline nuestra balanza de la probabilidad a favor de una posible zona de suelo.
No porque un valor haya llegado a un nivel determinado de precio, no visto desde hacía años, no porque hasta la fecha era una buena empresa y estaba en fuerte tendencia alcista, no porque el precio ya haya caído mucho y no creamos que siga cayendo…, no por todo esto y más, es momento de comprar.
Además, aunque acertemos y compremos en suelo, ¿quién nos dice que ese valor no va a permanecer en esa zona unos cuantos meses? ¿acaso sabemos que va a subir ya?
¿Permitiremos que nuestro dinero se quede inmovilizado sin obtener rendimiento alguno, hasta que las acciones se decidan a subir?¿Tenemos que sufrir todo ese tiempo y rezar cada día para que no nos salte el stop? Y si salta, ¿qué haremos? ¿Volveremos a entrar? Y así, ¿cuántas veces?
Que no nos ponga nerviosos ciertas noticias de que una acción determinada está muy barata, no nos dejemos llevar por la vorágine emocional de querer comprar porque ha caído mucho y sino compramos ahora, nos perderemos toda la subida y la oportunidad de poder jubilarnos… Cuidado.
Estamos ante momentos excepcionales, no vistos anteriormente. La incertidumbre ahora reina más que en ninguna otra situación vivida en el pasado, en otras palabras, no tenemos ni la menor idea de lo que va a ocurrir.
Por ello, hay que extremar las precauciones y que no sean las emociones humanas, como podría ser la codicia, las que nos hagan entrar a mercado cuando todavía no es el momento.
El precio es el que nos tiene que dar más información, solo él.
Ni siquiera, a mi modo de ver el trading, los acontecimientos que se vayan produciendo, puesto que hoy puede ser A y mañana B. Todo está demasiado complicado como para fiarnos de nada y basar nuestras decisiones de inversión en lo que vamos escuchando en los medios, porque ni siquiera tenemos la certeza de que nos estén contando la verdad al 100%.
Estudiemos el técnico de los activos e índices y basemos nuestras posibles operaciones de compra e inversión, en algo objetivo, en la observación de patrones de giro en las cotizaciones, en algo que, como decía antes, nos dé una mayor probabilidad de éxito a nuestro favor.
Y cuando ello se pueda hacer, hagamos una correcta gestión del riesgo, stops colocados correctamente, No convirtamos nuestras inversiones en herencias, porque no supimos salir de ellas en su momento.
Decisiones basadas en datos objetivos y reales, recordando que estamos en un mundo basado en probabilidades, nunca en certezas, pero jamás basadas en emociones que se dejan influir por el exterior y por lo que queremos que suceda.