Vivir en Dominica, una isla con potencial

Las placenteras noches de Dominica

Dominica, país de Sol, naturaleza, playa, aguas termales, cascadas y ríos; goza también de una vida nocturna con características propias. Ya desde los primeros instantes, cuando el extranjero se entrega a su cálida atmósfera, siente el deleite de estar viviendo una aventura con aroma tropical.

Enclavada en una zona privilegiada del Caribe, Dominica sustenta una vida nocturna más apacible que sus compañeras de mar. Vivir en Dominica significa saborear el paisaje con los cinco sentidos. Allí los exitosos hombres de negocio podrán disolver las marañas de agobiante estrés acumuladas en sus laboriosas horas. En esta isla, el crepúsculo se proyecta con tenue claridad, enrojeciendo el horizonte despejado y teñido de azul. Mientras la oscuridad de la noche se aproxima en cada oleada del océano Atlántico, las luces artificiales emprenden sus restallidos, como luciérnagas organizadas que se iluminan siguiendo patrones singulares.

Aunque es parte de la Mancomunidad Británica de Naciones, Dominica es una república independiente. Pertenece a la Comunidad del Caribe y a la Organización de estados del Caribe Oriental.

Adquirir la residencia para vivir en Dominica se ha tornado sencillo. Con la aprobación de sus leyes, existe la modalidad de los programas de ciudadanía por inversión, mediante el cual a través de las personas más indicadas, se puede invertir en el país por medio de un proyecto inmobiliario y así se le facilitará el papeleo y el pasaporte. Así pues, queda abierta la posibilidad para aquellos inversores de alto patrimonio neto, que requieran un mejor futuro y un segundo pasaporte para toda la familia y para siempre. 

Vida Nocturna en Dominica

Transcurrido ya el día, cuando todo atisbo de sol termina por hundirse en el distante horizonte caribeño, viene la calma a apoderarse de los espacios. La vida nocturna en Dominica tiene características diferentes a aquellas que existen en las otras islas del Caribe; es menos bulliciosa, menos ajetreada, menos atiborrada de espectáculos altisonantes. La vida nocturna asume particularidades que la hacen un lugar ideal para descansar y entrar en contacto con uno mismo, experimentar una metamorfosis que lo convierte en un ser completamente diferente.

No obstante; existen representaciones teatrales poco convencionales que harán las delicias de quienes busquen experiencias diferentes; conciertos; night-clubs; bares; discotecas. Quien lleve una vida nocturna muy activa no echará de menos la adrenalina de una noche de desenfrenos. Aunque lo habitual es que todos se vayan temprano a la cama. Es una isla que aguarda por las mentes que la llevarán hacia otros horizontes; invertir en una zona con gran potencial turístico y que todavía no cuenta con la infraestructura para aprovecharlo, tiene pues, latentes ventajas competitivas.

Si lo que se desea es disfrutar de una buena cena, Dominica cuenta con deliciosos platos con estilo caribeño. En su preparación, que es una exquisitez visual, se emplean las mismas técnicas que se empleaban antaño, heredadas por generaciones. También los platos propios del lugar como la Island Fish Soup o el pollo de montaña, hacen las delicias de los turistas que visitan el lugar.

Estas cualidades de la isla la hacen ideal para quienes deseen transformarla. Permite especular con las enormes posibilidades que ofrecen a los inversores creativos. Cada aspecto de Dominica es un recurso aprovechable en potencia.

Cultura, costumbres y tradición

En la isla, donde se habla inglés y francés, perviven dialectos como el cocoy o el criollo-francés. Su cultura es una mezcolanza de costumbres africanas, españolas, francesas y aborígenes. Actualmente, todavía se fabrican canoas talladas como se hacía tradicionalmente. De igual modo, muchas de las casas que se fabrican, sobre todo en las periferias aledañas a las ciudades, se fabrican sobre pilotes. Posee una población eminentemente católica, en cuya fe se arraiga la moral y los vínculos tradicionales familiares.

Entre sus costumbres mejor conservadas está la música, frecuentemente vinculada a sus danzas, tales como el zouk y el calipso.

Fiestas que se celebran en el país

En Dominica se celebra cada año el tradicional Carnaval Católico. Se despliega a lo largo de tres días, previo al Miércoles de Ceniza. Este carnaval se precia de ser un evento que se realiza con mucha originalidad, en este se manifiesta con más notoriedad la herencia pluricultural del país.

Está también el Dive Fest, que se realiza con la finalidad de promover el buceo entre los participantes, que pueden ser extranjeros o locales. Otro evento digno de mencionar es su Festival de Música Criolla, celebrado en vísperas del día de la independencia; esta fiesta convoca a todos los músicos y cantantes de las islas contiguas.

Características climáticas de la región
Por estar situada en el Caribe, Dominica, goza de un clima tropical. Es bastante húmedo en sus zonas centrales; esta razón explica el cuantioso número de ríos que peinan su superficie. Su temperatura media varía en torno a los 30°C, con máximos que bordean los 50°C.

La mejor temporada para visitar la isla se da entre enero y abril, cuando todo está más seco, aunque siempre hay riesgos de ocurrencia de chaparrones.

Si lo que se desea es invertir y vivir en Dominica, el gobierno brindará todas las facilidades del caso.

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