Supongamos que usted consideró detalladamente cada una de las características que convertían a una jurisdicción en la indicada para su negocio, tales como sistema bancario, estabilidad política y social, posibilidad de desarrollo de empresas, en fin, todo lo necesario para asegurarse de que su compañía estaría segura.
Sin embargo, puede que de manera inesperada alguno de estos puntos clave cambie. Por ejemplo, un gobierno puede alterar las tasas impositivas y dejar de ser una opción ideal en cuanto a finanzas.
¿Qué haría usted en este caso? Ante la necesidad de tener que trasladar su negocio, cabe la posibilidad de llevar a cabo la redomiciliación de la empresa. Dicho proceso se refiere a la transferencia de una compañía de un país a otro y en este artículo le explicaremos más al respecto.
¿Por qué optar por la redomiciliación de la empresa?
Puede ocurrir que, al verse en esta situación, se le sugiera que abandone la empresa anterior y opte por crear una nueva en otra jurisdicción. Por supuesto, esto no siempre es posible y mucho menos algo deseable.
Existen tres razones fundamentales para escoger la redomiciliación de la empresa:
- Permite mantener todo lo relacionado a la compañía de manera intacta; exceptuando, claro, el domicilio. Esto se debe a que, en lugar de tener que crear una sede o una nueva empresa (lo que le daría como resultado dos estructuras corporativas distintas), con una redomiciliación usted transferirá todo, por lo que solo existirá una entidad a su cargo. De esta manera, su negocio tendrá continuidad.
- Es una opción mucho más sencilla que incluso comenzar desde cero: es una forma de reducir costos (el proceso resulta económico) y con pocas operaciones de por medio.
- Una vez culminada la redomiciliación, su empresa tendrá las ventajas fiscales del nuevo país, dejando de lado las que obtenía anteriormente. ¡No tendrá que pagar dos veces! Al contrario, dependiendo de la jurisdicción que escoja, puede disminuir sus pagos. En Singapur, por ejemplo, las tasas corporativas son notablemente inferiores que las de otros países desarrollados.
Una desventaja podría ser que para poder llevar a cabo este procedimiento de manera legal, ambos países deben estar de acuerdo. Es decir, si usted desea que el nuevo domicilio de su compañía sea Singapur, debe asegurarse de que en su nación no esté penalizada esta actividad.
Además de Singapur, Portugal y Belice son muy buenas opciones para este tipo de transacción.
Permite mantener todo lo relacionado a la compañía de manera intacta; exceptuando, claro, el domicilio. Esto se debe a que, en lugar de tener que crear una sede o una nueva empresa (lo que le daría como resultado dos estructuras corporativas distintas), con una redomiciliación usted transferirá todo, por lo que solo existirá una entidad a su cargo. De esta manera, su negocio tendrá continuidad.
¿Cuál es el procedimiento?
Es importante que antes de intentar realizar la redomiciliación de la empresa los participantes se aseguren de que la misma esté en buen estado, sin hipotecas o deudas graves de por medio. De ser posible, se debe contar con un certificado de buena posición.
Otro punto crucial es que, antes de hacer la solicitud, usted debe asegurarse de que el nombre de su negocio esté disponible en el segundo país. De no ser así, debe suministrar una opción nueva.
Como siempre, los pasos dependerán de las leyes de cada país, aunque generalmente es el siguiente:
- La compañía firma un acuerdo o acta de redomiciliación donde establece que la junta directiva está de acuerdo sobre el traspaso.
- El documento es certificado y apostillado.
- Se envía a la nueva jurisdicción junto a los informes de buena reputación, certificados de constitución (copias legalizadas) y los estatutos de la asociación.
- Las entidades encargadas realizan el estudio pertinente y toman la decisión afirmativa o negativa.
- El registro de sociedades emite un certificado en el que se autoriza a continuar operaciones desde ese momento en el nuevo país y bajo esta legislación.
Luego de culminado este proceso, tendrá un lapso de aproximadamente 60 días para separar por completo a su compañía de la jurisdicción anterior.
Recuerde que desde la fecha en que se emite el certificado su compañía deberá guiarse según lo establecido en las leyes de su nuevo domicilio.
¡Así de fácil! La redomiciliación puede ser la opción indicada para usted, no pierda la oportunidad de recibir una asesoría al respecto durante nuestra primera hora de consulta gratuita.
En Mundo Offshore estamos preparados para apoyarlo durante cada paso, siempre buscando lo mejor para usted y su negocio. ¡Contáctenos! Tenemos más de 20 años de experiencia.